Obra titulada El árbol en la curva, realizado por Paul Cézanne en 1882. Se trata de un paisaje bicolor (verde y beis) de la campiña francesa.
La composición está formada por un sinfín de manchas de óleo que delinean las diferentes figuras de la campiña: caminos de tierra, pequeñas colinas, árboles y arbustos. El horizonte del cuadro (bastante alto) es irregular, y se muestra formado por un manto verde vegetal que da paso a un cielo azul y rosa.