Tela pintada a mano titulada Almiares, realizada en 1885 por Claude Monet. El cuadro pertenece a una serie de pinturas de la misma temática, conocida como Haystacks. Otro buen representante de esta época es Trigo en la Nieve.
A esta apacible tarde en el campo, Monet logra extraer toda clase de matices: múltiples colores en cada figura y efectos de luz asombrosos. Las manchas sobre la tela conforman un cuadro totalmente difuso, si se mira de cerca, la profundidad de campo y la incidencia de los rayos solares, sólo aparecen situándose a unos metros, tal como requieren la mayoría de lienzos impresionistas.